Aceites esenciales para hacer Aceites de Masaje

Aceites esenciales para masajes

Una de las maneras más eficaces de aprovechar todos los beneficios de los aceites esenciales es haciendo tus propios aceites de masaje. Puedes combinarlos con aceites vegetales o con bases de aceites de masaje que encontrarás en nuestra tienda online. Solo hay que disolver unas gotitas del aceite esencial que queramos en aceites portadores.

Se pueden mezclar con los aceites vegetales, como el de almendras, oliva, argán o jojoba, y también se pueden combinar con la manteca de karité, arcillas… En algunos casos, se pueden mezclar entre ellos. A la hora de diluirlos en una base aceitosa, la proporción de aceite esencial no debe superar el 1%.

Los aceites de masaje que hagamos con aceites esenciales no es aconsejable aplicarlos sobre las mucosas (boca, ojos, órganos genitales…). Además, se deben evitar aceites esenciales como el canela, clavo, ajedrea, orégano o tomillo.

A la hora de hacer un masaje, puedes optar por el aceite esencial de gaulteria, que alivia los dolores articulares o musculares, calambres, agujetas… Beneficios similares se obtienen con el aceite esencial de eucalipto. El aceite esencial de ciprés es ideal para tratar problemas de varices, celulitis y problemas circulatorios. Mientras, el de enebro es diurético y es bueno contra la retención de líquidos. El de pomelo ayuda a combatir la celulitis. Eso sí, hay que tener en cuenta que es fotosensibilizante, por lo que no hay que exponerse al sol después de su aplicación, ya que podrían aparecer manchas. El aceite esencial de rosa es calmante y regenerante, lo que lo hace perfecto para un masaje antistrés. Un efecto similar conseguirás con el palo de rosa.

La utilización de los aceites esenciales para hacer aceites de masaje tiene dos beneficios: por un lado aprovechas sus propiedades, a la vez que su fragancia conseguirá, a través de la aromaterapia, mejorar el estado físico y psicológico de la persona que recibe el masaje.